Cuando alguien desea algo debe saber que corre riesgos y por eso la vida vale la pena. (Paulo Coelho)

6 de junio de 2009

Soñar hace daño

Es comprensible que a uno no le agraden todas las personas, pero no tanto cuando te agradan todos y cada una de las personas de una reunión, junta, grupo, que sé yo... Algo malo va, es imposible que uno esté de acuerdo y en perfecta sintonía con diecinueve personas en un mismo lugar y un día determinado cada semana. Obvio, cada persona tiene una manera de pensar diferente, también es probable que algunos se lleven mejor con unos que con otros. Pero cuando una no es así y trata de ser sociable, no todo encaja y eso es lo raro. Yo calzaba perfecto. Hasta ese día... Cuando ya no calzé más y me di cuenta de que no todo era color de rosa, que yo era la que veía diferente y que desde un principio nada calzó, nada concordó y yo me puse una sabana en lo ojos y creer que todo iba de maravillas, cuando nada fue así y un día dejé de soñar que yo era sociable y alegre y divertida, ese día dejé de soñar que podía elacionarme con todo tipo de personas y ese día, también aprendí que debo guiarme por lo que ya conozco no por lo que se ve bueno y está por conocerse. Ya aprendí que me quedo en lo mío y en lo que ha estado conmigo siempre... Así aprendo otra cosa, de una vez por todas, a no creer lo que sueño y así me duele poco cuando me caiga de bien alto. Y me doy cuenta otra vez que sueño, sueño mucho...
Y eso me hace daño.

1 comentario:

Susurros